Aprende a poner fin al Autosabotaje

Tenemos algunos días de vacaciones.  Me encanta pensar en los ratos libres que descubriremos y en cómo aprovechar mejor ese tiempo que nos encontremos. Es verdad que la mayoría de vosotros tendréis ya una lista larga de cosas para hacer estos próximos días, pero como las circustancias actuales de la pandemia no nos van a dar la oportunidad de salir mucho ni de reencontrarnos, en persona, con nuestros seres queridos, quizas querríamos usar este tiempo en cuidar de nosotros mismos e intentar aliviar un poco el posible sufrimiento que podamos estar arrastrando y así allanarnos el camino de las próximas semanas, meses o décadas.

Quiero hablaros de algo tan importante como dejar de ser nuestro peor enemigo. Dejar de autocriticarnos severamente por todo aquello que no alcanzamos y dejar de sentirnos culpables por circustancias que muchas veces están fuera de nuestro control. 

Somos seres brillantes, pero a menudo actuamos como nuestros peores enemigos. Puede que sepamos exactamente aquello que necesitamos para lograr nuestros objetivos y ser felices, pero con frecuencia nos negamos a hacerlo o nos interponemos en nuestro propio camino. Detrás de nuestras críticas implacables puede haber pensamientos irracionales, y algunas teorías dicen que estos pensamientos vienen de la ignorancia pura. O sea que si se  nos enseña el modo de pensar y actuar de una forma más adaptativa, el cambio positivo debería tener lugar. Sin embargo, aún , a veces,  las personas  se aferran a la autocrítica y al autosabotaje frente a toda lógica y razón.

Platón y los estoicos aseguraban que nuestro intelecto es racional, pero nuestras emociones son irracionales. Estas teorías  dicen  que la autocrítica y el autosabotaje  pertenecen al campo de la emoción, algo que no puede comprenderse por el intelecto. Pero, tampoco podemos quedarnos ahí. Y como no quiero dilatar más la posible solución a este mal, paso a describir una técnica que puede ayudarnos a tratarnos mejor y a ser más amables con nosotros mismos, cuando cometemos errores.

Se trata de la Autocompasión. La autocompasión es una práctica de "no violencia" profunda. No transformamos nuestros pensamientos y nuestros sentimientos en enemigos que deben ser destruidos. En lugar de ello, usamos la compasión y el amor para convertir esos enemigos en amigos. Escuchamos, empatizamos, dialogamos y nos reconciliamos.


El primer paso para tratar con éxito el autosabotaje consiste en comprender cómo funciona. Sabes que el autosabotaje puede producirse incluso cuando alguien se siente muy motivado para cambiar. Dentro de nosotros,   existe una parte consciente que quiere cambiar y otra parte que tiene una razón importante para no hacerlo. Y, es probable que  seamos completamente inconscientes de que existe esta segunda parte. No vamos a  tratar de destrozar o de derrotar a esa parte, sino que vamos a comprenderla y empatizar con ella. El autosabotaje puede ser un intento (infructuoso, claro) de aliviar el sufrimiento y de crear felicidad

Imagina que tuvieras depresión. ¿Podría ser que una parte de ti querría permanecer deprimida? Para poder descubrir si esta parte, que intenta autosabotearnos, está dentro de nosotros, podemos usar la técnica de  completar las frases con el objetivo de encontrar compromisos opuestos. Podríamos estar atentos a qué palabras aparecen en nuestra cabeza, incluso aunque no tengan sentido. Para ello, es necesario permitir que la parte saboteadora termine la frase "necesito estar deprimido/a porque si no..." Haz la prueba con cualquier sufrimiento que tengas.

Otra técnica es usar el proceso «Alimenta tus demonios™».  Este proceso comienza activando el síntoma y sintiéndolo en el cuerpo. A continuación,  personificamos en él alguna forma humanoide. Por ejemplo, podríamos imaginar nuestra autocrítica como un demonio rojo con cuernos. Durante el  proceso  empatizamos con esta personificación. Mientras te imaginas al demonio,  puedes plantearle preguntas tales como: «¿Qué necesitas?»; «¿cómo estás tratando de ayudar?»; «¿cuál es tu trabajo?»; «¿qué necesitas que escuche?». Querrás seguir profundizando la investigación hasta que el demonio exprese la intención positiva que está en la raíz de sus acciones. Una vez lo descubres,  responde con compasión. 

Y, ahora sí, disfruta de las nuevas sensaciones que la aceptación y la autocompasión te proporcionan.

Desmond, T. (2018). La autocompasión en psicoterapia: prácticas basadas en la conciencia plena para la curación y la transformación. Bilbao, Editorial Desclée de Brouwer.